miércoles, 23 de junio de 2010

Volver a empezar

11 de Junio 2010
El Espectador de colombia

Por: Danilo Arbilla

Lima. En su entrega de la semana pasada (9/6/10), la prestigiosa revista brasileña Veja dedica su entrevista de apertura al joven economista turco del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), Daron Acemoglu, quien sostiene que la tecnología y la educación son fundamentales para el crecimiento económico, pero advierte que sin instituciones saludables ningún país puede conseguir la mejor tecnología ni la mejor educación.

Estima también el economista del MIT que la prensa es central - básica- para la democracia y que por eso – dice- es tan atacada (por los enemigos de la democracia), y se pregunta: "¿quién va a impedir al gobernante de ejercer el poder de modo arbitrario, de beneficiar a su primo o a su cuñado o silenciar a su rival?". "La única fuerza capaz de hacer eso- concluye- es la sociedad, la que solo podrá saber lo que pasa por la prensa".

Todo ello es cierto, pero no muy novedoso dirá el lector. Sin embargo, no resulta ocioso repetirlo. El periodista venezolano Rafael Poleo, perseguido político del régimen chavista, encabeza sus columnas semanales que escribe desde el exilio con esta certera máxima de André Gide: "Todas las cosas son ya dichas; pero como nadie escucha, hay que volver a empezar siempre". Y parece que así son las cosas. Hace tres semanas, el presidente peruano Alan García me hablaba de los "malos modales "de sus colegas de los continentes que impedían el ingreso de Honduras y Porfirio Lobo a la OEA mientras pugnaban por el ingreso a la organización de Cuba y de los Castro, a despecho de la Carta Democrática que se dice que la rige.

Pese a la sensatez de su visión, la lógica de sus argumentos y de ser el dueño casa, igual Alan García no logro que la Asamblea de la OEA celebrada en Lima retomara aunque sea en ese tema los buenos modales. El caso Honduras pasó a estudio de una comisión de "alto nivel", porque los miembros de la organización necesitan "mayor información” sobre la situación de Honduras. Ciertamente que las coincidencias entre el discurso –informe del Secretario General José Miguel Insulza, su propia gestión y objetivos y buena parte de los principios de la Carta Democrática Interamericana y la realidad imperante a nivel continental, son mera casualidades.

Por ejemplo, al mismo tiempo que el canciller venezolano votaba respetar la Carta Democrática y los Derechos Humanos, Hugo Chávez ponía en marcha el Cesna (Centro de Estudio Situacional de la Nación), un poderoso organismo para censurar la información y controlar los medios de comunicación. El Cesna, "reserva” para el Poder Ejecutivo (Chávez), "la recolección, clasificación y divulgación de (todos) aquellos asuntos"…"concernientes a la seguridad de la Nación". ."El Estado". "la sociedad...”...la defensa...” y que a criterio de (Chávez) tengan que ver con "el interés nacional" y "la satisfacción de los intereses y objetivos nacionales" "en los ámbitos económicos, social, político, cultural, geográfico, ambiental y militar". Todo con la suficiente ambigüedad para que no escape nada y sin ningún tipo de control. Algo similar solo en la época de la Alemania Nazi y de la Unión Soviética o actualmente en la Cuba de los Castro.

No se sabe si los cancilleres de la OEA han nombrado alguna comisión para contar con "mayor información" sobre si esta iniciativa de Chávez "encaja” en el menú democrático vigente. Es que hoy el principal problema no es que la gente no quiere escuchar, si no que cada vez son más los que quieren dictar lo que la gente puede ver, leer y escuchar.

Danilo Arbilla

No hay comentarios:

Publicar un comentario